Interposición lingual en niños: todo lo que debes saber

Con frecuencia, los niños desarrollan malos hábitos orales, la mayoría de las veces de forma inconsciente, pero si perduran durante largos periodos de tiempo, pueden convertirse en hábitos bucales perjudiciales y traer consecuencias graves para la salud. 

Uno de esos malos hábitos es la interposición lingual, un problema bucodental que puede afectar el desarrollo orofacial.

¿Pero sabes en qué consiste la interposición lingual en los niños y cuáles son sus causas y consecuencias? Acá te lo diremos para que puedas tomar las medidas adecuadas, si tu hijo la padece. 

¿Qué es la interposición lingual? 

La lengua es un conjunto de músculos que cumplen diversas funciones fisiológicas, como intervenir en el proceso de deglución, masticación, degustación, fonación y la formación del bolo alimenticio. 

Por ello, cuando existe un desarrollo y funcionamiento anormal de este músculo, pueden producirse deformaciones dentoesqueletales, sin mencionar otros problemas asociados, como psicológicos, emocionales, del sistema respiratorio, digestivo y dificultades de aprendizaje. 

Ahora bien, ¿qué es, en sí, la interposición lingual?

Según la Sociedad Argentina de Pediatría: «La interposición lingual es una posición anómala de la lengua, entre los dientes de la zona anterior o posterior, en reposo o en función, y contribuye a una desviación en los patrones de deglución. La actividad en esta posición anómala determina un cambio en la morfología facial, la hiperactividad de los músculos depresores de la lengua la posicionan sobre el piso de boca, en lugar de estar con la zona anterior adosada al paladar y tras los incisivos superiores en su estado de reposo».

En palabras más sencillas, en posición normal la punta de la lengua descansa a nivel del cuello de los incisivos superiores, mientras que la parte posterior de la lengua toca ligeramente el paladar. Pero cuando se produce una interposición lingual, la lengua se coloca entre los dientes en el momento de la deglución y al hablar. 

Esto significa que la lengua interfiere con el movimiento natural de los dientes al tragar, conocido como deglución atípica, y con la modulación de los sonidos. 

La interposición lingual es más común en niños pequeños, ya que aún no han aprendido a tragar correctamente y puede deberse a varias causas. ¡Veamos cuáles son!

¿Cuáles son las causas y síntomas de la interposición lingual en niños?

Durante los primeros meses de vida, la cavidad oral es pequeña y el patrón de deglución es inmaduro. Pero cuando comienza la dentición, la lengua empieza a retraerse y la deglución evoluciona. Si esto no sucede, probablemente sea un caso de interposición lingual o deglución atípica que persiste y que puede ser causada por varios factores: 

• Succión digital del chupón o biberón: Los niños que conservan los hábitos de succión más allá de los 4 años de edad, principalmente la succión de dedos, el chupón o el biberón, origina que coloquen la lengua en una posición muy baja, facilitando su proyección durante la deglución. 
• Alimentación artificial con exceso de flujo de leche: En edades tempranas, una alimentación artificial inadecuada puede forzar al bebé a interponer la lengua para frenar el exceso de flujo de leche.
• Problemas respiratorios: Cuando existen problemas respiratorios, el niño tiende a desarrollar el mal hábito de la respiración oral. Respirar por la boca ocasiona problemas de sellado labial con disminución del tono muscular y de la actividad de los músculos orbiculares, que rodean la boca y conforman la mayor parte de los labios.
• Amígdalas inflamadas: Si las amígdalas se infectan, pueden obstruir el paso del aire desde la nariz a los pulmones, produciendo respiración bucal y frecuentes afecciones del aparato respiratorio, dificultando el sellado labial. Asimismo, las amígdalas inflamadas o hipertróficas ocasionan que en el momento de la deglución el niño coloque la lengua hacia delante, de manera que el bolo alimenticio no provoque molestias o dolor al tocar las amígdalas. Esto afecta el desarrollo normal y las funciones del sistema estomatognático y puede generar deglución atípica.

• Macroglosia: Cuando la lengua se desarrolla de un tamaño superior con respecto al resto de la estructura de la cavidad oral, la lengua está obligada a adoptar una posición hacia adelante, lo cual puede generar problemas de oclusión y dificultades a la hora de masticar o tragar.
• Problemas de coordinación motora: Cualquier afección en el cerebro dificulta la coordinación motora necesaria para las funciones que realizan las arcadas dentales y la lengua.
• Pérdida prematura de dientes temporales: Si los niños pierden muy temprano los dientes temporales o de leche, puede conducir a una disminución del espacio para los dientes permanentes sucesivos, desplazamiento de los otros dientes y acortamiento de la longitud de la arcada, lo que podría conllevar problemas de oclusión. 

Como puedes observar, las causas pueden ser múltiples y, a veces, es difícil detectarla, lo que puede provocar malformaciones dentomaxilares que afectan la salud orofacial de los niños. 

¡Te explicamos las más importantes! 

Consecuencias de la interposición lingual en la salud bucodental de los niños

Como te decíamos, la interposición lingual puede conducir a daños en el sistema estomatognático, que es el conjunto de estructuras destinadas a cumplir las funciones de masticación, succión, deglución y fonación. Por ello, es importante que conozcas también cuáles son las consecuencias que trae para la salud bucodental de tus hijos:

Mala alineación dental

Cada vez que tragamos necesitamos estabilizar la mandíbula utilizando la fuerza lingual adecuada, pero la deglución es correcta solo si existe una perfecta oclusión, ya que si no, se presentan incorrecta alineación dental y protrusión, que es el desplazamiento de los dientes hacia adelante.

Deglución atípica 

Cuando la posición de la lengua es inadecuada en el momento de tragar el alimento, se produce presión anterior o lateral de la lengua contra las arcadas dentarias, desarrollando lo que se conoce como deglución atípica. En los niños, es un hábito oral incorrecto, que se inicia cuando la deglución infantil atípica se prolonga más allá de la erupción de los dientes anteriores. 

Maloclusión 

Cuando existe una inadecuada posición de la lengua con respecto a los dientes, pueden desarrollarse maloclusiones dentales y maxilares, que se refiere a la forma como encajan las piezas superiores e inferiores cuando no hay un sellado correcto de la boca durante el acto de la deglución.

Deformaciones en la dentición

Los malos hábitos orales conducen a deformaciones en los dientes, como por ejemplo, el apiñamiento dental, que consiste en una dentadura desordenada o dientes girados o montados unos sobre otros. Se desarrolla por una ubicación inadecuada de la lengua entre los incisivos, molares o premolares, que afecta el patrón de deglución.

Dificultades de fonación o pronunciación

Las personas aprenden a hablar desde los primeros años de vida, por lo que es importante que el niño realice apropiados movimientos de la lengua para poder pronunciar los fonemas o sonidos de las letras correctamente. Pero si no existe una posición lingual adecuada, el niño desarrolla muchos problemas que le imposibilitan hablar bien, especialmente en la pronunciación de ciertos fonemas o sonidos como la D, T, S o R.

Respiración bucal

La respiración bucal o respiración oral se produce cuando se obstruyen las vías aéreas superiores y la lengua se ubica en una posición descendida para permitir la entrada del aire, lo que puede ocasionar interposición lingual, paladar ojival y triangular, mordida abierta anterior y mordida cruzada, inclinación de los dientes incisivos superiores, entre otras afecciones.

Problemas en la masticación (mordida abierta, mordida cruzada) 

La mordida abierta se caracteriza por la falta de contacto de los dientes anteriores, y ocurre cuando al masticar y tragar los alimentos, el niño lo hace con la punta de la lengua detrás de los incisivos. Esto genera presión al empujar los dientes con la lengua, lo que conduce a que, eventualmente, los dientes y el hueso maxilofacial cedan hacia fuera.

La mordida cruzada tiene lugar cuando no hay una relación correcta entre el maxilar superior y la mandíbula, por lo que existe un encaje inadecuado de los dientes. Esto ocasiona que los dientes de la arcada superior, al morder queden por detrás de los dientes de la arcada inferior, impidiendo así una correcta oclusión.

Pues bien, conociendo los factores de riesgo que te mencionamos, quizás te preguntes cómo puede corregirse esta anomalía, así que sigue leyendo para que disipes esta duda.

¿Existen tratamientos para corregir la interposición lingual? 

Para solucionar este mal hábito oral es necesario realizar un tratamiento que permita corregir la mala posición de la lengua durante la deglución

Es un tratamiento multidisciplinario, que incluye diferentes terapias con profesionales como logopedas, odontólogos, pediatras, fonoaudiólogos, psicólogos y kinesiólogos, con el apoyo y la participación de la familia. 

Por una parte, el ortodoncista utilizará aparatología para cerrar la mordida y expandir las arcadas, de modo que la lengua tenga las condiciones funcionales idóneas. 

Por otra parte, el logopeda, junto con otros especialistas, pueda realizar una terapia miofuncional, ayudando al niño a adquirir nuevos hábitos orales por medio de la reeducación, con el fin de lograr que los músculos funcionen con los movimientos correctos y el patrón de deglución infantil evolucione a un patrón de deglución normal.

La detección en los primeros años del mal hábito referido a la posición lingual es fundamental para el éxito de su eliminación, por ello tanto los papás, como los profesionales de la salud que atienden al niño deben estar atentos a hábitos como la respiración oral, los hábitos de succión digital y la pronunciación de ciertos fonemas o sonidos de forma incorrecta.

Si observas en tu niño alguno de los problemas mencionados, es importante acudir a un odontopediatra u ortodoncista de confianza, para evaluar la gravedad del problema y determinar el mejor tratamiento para cada caso. Los odontólogos de Moons podemos asesorarte e indicar qué pasos debes seguir para que tu niño supere esta alteración y goce de una salud bucodental plena por muchos años.

Finalmente, recuerda que la educación sobre la salud es parte integral de los temas que comprenden la salud en general. Visita nuestro blog para ayudar a tus niños a superar los hábitos que comprometen su salud bucodental.